En la temporada del 2009 Andres Eduado Perez llega al cuadro azucarero, luego del pedido del DT Cheche Hernandez.
El arribo de un capitán a un barco que se hundía lentamente, fue el ancla que le dio respiro a mucha gente. Nada mejor que un jugador profesional que llene a la hinchada de felicidad, que a pesar de venir de un equipo lejano a esta ciudad, sea tomado con gran aprecio y apego por una hinchada exigente, que en aquel 2009 quería resultados tanto como los quieren ahora.
El numero 5 se volvió una marca emblemática para este jugador que desde hace 4 años, nos deleita con la seguridad en el campo, con una entrega total en cada partido.
Como no admirar la entrega en la cancha de un jugador que lo hace por vocación y no por plata.
Poder apreciar que lo triste no es un mal resultado, sino el mal desempeño de un equipo. Me hace recordar que puede ver la tristeza reflejada en la cara de este gran jugador, después de la derrota ante Itagui, llevo sus manos a la cara y con un gesto de desconsuelo, reflejo la impotencia, la tristeza después de una derrota. Ahí es donde uno como hincha se da cuenta que para unos jugadores no es solo un trabajo, sino el sueño que vive atrás de un balón.
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